DEJARSE LLEVAR (UNA GUÍA NECESARIAMENTE ABREVIADA Y HUMILDE DE LA TÉCNICA DE LA MEDITACIÓN, DEDICADA A LOS ANSIOSOS DE ESTE MUNDO DE PRISAS Y AGOBIOS)
El deseo de meditar, la complacencia en el meditar, van ganándome a mí por grados; conforme avanzo en la vida leo menos y medito más; en realidad, el fruto de la lectura no es menor ahora -cuando leo menos libros- que antes; leía antes más libros, leía sin cesar libros y libros, y de todos ellos sólo quedaba en mí una porción pequeña, acaso lo esencial; lo esencial de entonces ha variado tal vez ahora para mí; los pocos libros que ahora leo los aprecio en todos sus matices y encuentro en ellos accidentes y circunstancias en que antes no reparaba. Todo ello, naturalmente, es resultado de la meditación. José Martínez Ruiz, “Azorín”: El escritor . Deseche esos pensamientos infantiles de queja permanente que siguen acuciándolo una y otra vez, porque meditar es un acto reservado sólo a las personas que han dejado atrás el es que , la queja constante. Sólo quien haya dejado de quejarse de ...