Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de abril, 2021

EL AMANTE DE LOS LIBROS

          A Sevilla, que tanto me ha dado Usted váyase, váyase de mi vida ya. Usted (le gustaba, cuando reñía con su marido, siempre ustedearlo) no ama a nadie, usted ama solo a sus libros. Él cerró la puerta ofendido como otras veces. Últimamente lo hacía con más frecuencia de lo normal, sobre todo las tardes de los viernes. Aquel día de la semana dedicado a la diosa Venus, en vez de ser para ambos un remanso de paz al final de las terribles semanas de trabajo, se había ido convirtiendo casi en un martes, día dedicado a Marte, el dios de la guerra. Aquel día él quería dedicarse a su pasión de la escritura, pero ella lo avasallaba con todas las cosas que tenían que hacer en el fin de semana, en una obsesión enfermiza por exprimir cada segundo de aquellas pocas horas de descanso. Aquella tarde, la tarde del Día del Libro precisamente, la marejada fue en aumento y, como casi siempre, todo empezó por una nonada: ella había querido salir a dar un paseo con él, pero el escritor le h

UNA HERENCIA DE PALABRAS Y RISAS

  La semana pasada se me murió mi tío Juan Núñez, poseedor de una de las sonrisas más francas y sinceras que jamás he conocido en esta vida. Al recordar los momentos que viví con él, me acordé del más intenso de todos, que tuvo lugar hace ya bastantes años en un pasillo de la antes llamada UVI (Unidad de Vigilancia Intensiva) del hospital de Riotinto. Mi padre, mi tío Juan y yo habíamos entrado en el pasillo de visitas para dar ánimos a mi abuelo Manuel, que unos días antes había sufrido un infarto del que, por desgracia, no iba a poder recuperarse. Quisimos transmitirle a mi abuelo todo el ánimo posible, pero él, ajeno a nuestros mensajes de esperanza, desde su cama empezó a dictar instrucciones sobre cuál debía ser el destino final de todas las herramientas y toda la tornillería que había quedado en su cuartillo de trabajo, organizada en latas de pastas o de galletas. Mi abuelo iba enumerando de veras la herencia que quería legarles a mi padre y a mi tío, entre las bromas n

VUELVA USTED NUNCA

    Martes. 6:07 horas. Salta el despertador de la radio:   ...son las últimas noticias: el ayun                               tamiento de Villarriba de Abajo ha tomado una decisión polémica, la de instaurar un documento de identidad para sus vecinos. Los villarribajenses a partir del mes próximo, si quieren acceder a servicios municipales gratuitos, deberán señalar su pertenencia y fidelidad al municipio mediante este procedimiento. La oposición municipal ha protestado porque considera que esta medida debería aplicarse también a los habitantes de la pedanía de Villabajo de arriba y no solo a los vecinos de alta alcurnia de toda la vida del núcleo fundacional...                6:50 horas. Delante de la tostada:                   ... el coronavirus es un virus que produce enfermedades coronarias entre otras secuelas. Es importante seguir las siguientes recomendaciones al llegar de la calle: lávese las manos y quítese la mascarilla (y no al revés), haga el pino puente enc

UN BAILE DE MADRUGADA (CUENTO)

        El   amor, intenso y fijo, siempre había estado ahí. (...) Lo había ido dando, de manera extraña, en cada momento de su vida y quizás lo había dado más cuando no era consciente de estar dándolo.           John Williams: Stoner .           Recordaba como si fuese ayer el día en el que vio llorar por primera vez a su padre, pero no conseguía muchas veces responder a la pregunta de cuál había sido su última cena.         La mente de Carmen era cada vez más una confusa mezcla de recuerdos y de sensaciones primarias que apenas era capaz de convertir en palabras, pues los estragos de la demencia senil iban siendo cada vez más evidentes y acuciantes.         Sus últimos años de vida estarían vinculados para siempre a los muros de aquella residencia de ancianos, la misma en la que de joven trabajó como limpiadora.         Las monjitas que regentaban el asilo la trataban con mucho cariño, pues ella ya era una institución allí.         La jornada empezaba siempre