
Es lamentable ser tiranizado por un enemigo externo, pero más lo es serlo por las propias ideas de libertad.
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Quien no es capaz de distinguir entre autoridad y autoritarismo confundirá siempre la democracia no con el gobierno del pueblo, sino con el gobierno de los iletrados.
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Conclusión precipitada de las últimas máximas: la selección natural (sea por el camino de la civilización o por el de la barbarie) termina siempre imponiéndose.
Comentarios
Un abrazo.
Corrijo la máxima:
Es lamentable ser tiranizado por un enemigo externo, pero también lo es serlo por espurias ideas de libertad.
Gracias por el comentario. Un abrazo mercurial.